Ingredientes:
- 2 tazas de leche entera
- 1/2 taza de azúcar
- 1/3 de taza de cacao en polvo sin azúcar
- 1/4 de taza de almidón de maíz (maicena)
- 1/4 de cucharadita de sal
- 4 yemas de huevo
- 2 cucharadas de mantequilla
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla
- 1 taza de chocolate semidulce picado (o chispas de chocolate)
Instrucciones:
- En una cacerola grande, combina el azúcar, el cacao en polvo, el almidón de maíz y la sal. Mezcla bien estos ingredientes secos.
- En un tazón aparte, bate las yemas de huevo y luego añádelas a la mezcla de ingredientes secos. Revuelve hasta que obtengas una pasta espesa.
- En una cacerola aparte, calienta la leche a fuego medio hasta que comience a hervir. Es importante no dejar que hierva completamente, solo hasta que aparezcan pequeñas burbujas en los bordes de la leche.
- Retira la leche caliente del fuego y, poco a poco, vierte una pequeña cantidad (aproximadamente 1/4 de taza) sobre la mezcla de yemas de huevo y ingredientes secos, revolviendo constantemente. Esto ayudará a evitar que las yemas se cocinen demasiado rápido.
- Continúa agregando la leche caliente gradualmente mientras revuelves hasta que todos los ingredientes estén bien combinados.
- Lleva la mezcla de nuevo a la cacerola y cocina a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente, hasta que la mezcla comience a espesarse. Esto debería tomar unos 5-7 minutos.
- Una vez que la mezcla haya espesado lo suficiente, retírala del fuego y agrega la mantequilla y el extracto de vainilla. Revuelve hasta que la mantequilla se haya derretido por completo y la mezcla esté suave.
- Incorpora el chocolate semidulce picado o las chispas de chocolate en la mezcla caliente hasta que se derritan y la mezcla se vuelva aterciopelada y brillante.
- Vierte el pudin de chocolate en tazas o recipientes individuales para servir.
- Cubre cada taza con una envoltura de plástico o papel film para evitar que se forme una piel en la parte superior del pudin.
- Refrigera durante al menos 2-3 horas, o hasta que el pudin esté completamente frío y firme.
Sirve tu delicioso pudin de chocolate frío y, si lo deseas, puedes decorarlo con crema batida y virutas de chocolate antes de servir.
¡Disfruta de este irresistible pudin de chocolate casero! Es perfecto como postre o para satisfacer tus antojos de chocolate en cualquier momento.