Las rotativas universales dieron cuenta puntual del anuncio, por parte de la Fundación Princesa de Asturias, en el que dieron a conocer que Joan Manuel Serrat era el acreedor, este 2024 en el rubro de las artes, por ser: “una de las figuras más destacadas de la canción moderna“.
Sus canciones forman parte de la memoria emocional de varias generaciones en España y América Latina, tanto en catalán como en castellano, dos lenguas que ha fomentado y ayudado a progresar, lejos de cualquier enfrentamiento, desde un equilibrio natural como vehículos de concordia y entendimiento”.
Hablar de Serrat es entrar al mundo del arte, en él podemos reconocer a un exponente fiel de nuestra época. Un cantante que nos ha otorgado la oportunidad de reconocer que el mensaje es más enérgico a voz.
Con su maestría en la interpretación, la sensibilidad de los acordes, sumado a la potencia de las letras, ha podido incidir en los planos artístico, ético, emocional, poético y político, dejando siempre estelas a su paso y una huella profunda en cada corazón que ha tocado para comprometer en una lucha de profunda humanidad
Este autor reconocido universalmente como cantautor, compositor, actor, escritor, poeta y guitarrista español, es sobre todo un artista honesto y comprometido con su obra y generoso para quien lo quiera escuchar, de ahí su trascendencia como cantante. Serrat siempre se caracterizó como un juglar incansable desde hace casi 60 años, donde nunca se cuestionó la calidad de su producción.
Un hombre de carácter y de gran orgullo catalán, basta recordar que en 1968 rechazó representar a España en el festival de Eurovisión si no podía cantar en catalán el La, la, la que había compuesto el Dúo Dinámico.
Un artista con convicciones y posturas políticas, que le costó muchas críticas, pero también gran reconocimiento por su seriedad en sus opiniones contra el franquismo, así lo hacia saber en conciertos y presentaciones: "Siempre he condenado la postura represora del Gobierno franquista […]. La pena de muerte solo sirve para seguir acobardando a la gente […]. Además de Franco, el pueblo español tiene un gran enemigo, Estados Unidos, que en ningún momento ha abierto la boca para acallar al Gobierno franquista".
Su defensa de la libertad, compromiso cívico y la lucha permanente por el respeto de los derechos humanos, no solo se ha quedado en la península ibérica, también ha recorrido los países de Hispanoamérica, donde se sumó contundente a las causas contra las cruentas dictaduras militares de Argentina y Chile.
Una de las producciones discográficas más reconocidas es Dedicado a Antonio Machado, poeta, donde las canciones Cantares, llanto y copas, la saeta se han quedado en el colectivo. Sin embargo, canciones como Mediterráneo, Penélope, Aquellas peñas cosas, esos locos bajitos, Fiesta, entre otro centenar de baladas, son parte de la play list de nuestro mundo.
¡Felices 50 y 17 Joaquín! pic.twitter.com/NZhlslg2Rq
— Joan Manuel Serrat (@SerratEscribe) February 12, 2016
Ahora, retirado hace año y medio de los escenarios, crece el interés por el reconocimiento a uno de los más emblemáticos artistas ibéricos de la segunda mitad del siglo XX. Al conocer que ha sido el más reciente laureado de la Princesa de Asturias hace una declaración, que es imposible no reconocer la sensibilidad de su genio: “No saben con cuánta alegría y emoción recibo la noticia de la concesión del Premio Princesa de Asturias de la Artes 2024. No encuentro mejor manera que una distinción tan prestigiosa como esta para despedir una carrera profesional larga y satisfactoria como la mía”.
Joan Manuel Serrat, un emblema artístico, con compromiso social. Un representante que siempre ha tenido claro la dignidad de la lucha social, por orgullo de su tiempo.
¿Quién es Joan Manuel Serrat?
Joan Manuel Serrat Teresa, conocido simplemente como Joan Manuel Serrat, nació el 27 de diciembre de 1943 en Barcelona. Criado en el barrio del Pueblo Seco, en el seno de una familia obrera, su infancia estuvo marcada por las calles y la gente de su entorno, una experiencia que influenciaría profundamente su obra artística.
Desde temprana edad, Serrat mostró interés por la música y la poesía. A los doce años, ingresó como alumno interno en la Universidad Laboral de Tarragona, donde cursó el Bachillerato Laboral Superior en la especialidad de “Industrial Minera”, graduándose como tornero fresador.
Fue durante sus años de estudio cuando comenzó a tocar la guitarra y a componer sus primeras canciones. En 1965, mientras realizaba estudios de perito industrial en agronomía, se presentó en el programa Radioscope de Radio Barcelona, interpretando sus primeras composiciones. Este fue el inicio de su carrera musical.
Serrat es reconocido como uno de los pioneros de la Nova Cançó catalana y fue miembro del grupo Els Setze Jutges, un conjunto de cantantes en lengua catalana que defendieron la cultura y la identidad catalanas durante la dictadura franquista.
Su debut discográfico llegó en 1965 con el EP “Una guitarra”, seguido por “Ara que tinc vint anys” en 1966. A partir de entonces, su carrera despegó rápidamente, publicando tanto en catalán como en español y ganando popularidad en ambos idiomas.
En 1968, Serrat incursionó en el mercado hispanohablante con una serie de sencillos en español, que más tarde se recopilaron en su álbum “La paloma”, en 1969. A pesar de las críticas recibidas por parte de algunos sectores por cantar en español, su música ganó una audiencia cada vez más amplia, consolidándose como uno de los cantautores más importantes de España y América Latina.
A lo largo de su carrera, Serrat ha sido reconocido con numerosos premios y distinciones, incluyendo la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio por su contribución a la cultura española. Además, ha recibido doctorados honoris causa y el Grammy Latino Persona del Año en 2014, entre otros galardones.
Joan Manuel Serrat no solo es un músico y compositor consumado, sino también un actor, escritor y poeta de renombre. Su obra refleja la riqueza y diversidad de la cultura española, con influencias que van desde la poesía de Mario Benedetti y Miguel Hernández hasta el folklore catalán y el cancionero popular latinoamericano. Su legado perdurará como una parte integral de la historia musical y literaria de España.