El desfile de Gucci en la Semana de la Moda de Milán, liderado por Sabato De Sarno, reflejó su visión de “grandeza casual” y fue Inspirado en Jackie Kennedy y los años 90 de Tom Ford. El evento, en sí, marcó un hito para la marca.
La “Grandeza Casual” de Gucci Toma el Escenario en Milán
El desfile de Gucci en la Semana de la Moda de Milán se destacó por presentar la visión renovada del director creativo Sabato De Sarno, quien ha definido su enfoque bajo el término “grandeza casual”.
Esta colección, una mezcla entre lo refinado y lo irreverente, capturó la atención de los presentes y fue un homenaje a la elegancia relajada, donde los elementos icónicos de la marca fueron reinterpretados para una audiencia moderna.
El desfile de Gucci fue mucho más que una pasarela, fue un despliegue de historia, nostalgia y contemporaneidad. Sabato De Sarno, quien asumió el cargo de director creativo, hace poco más de un año, apostó por una colección que mezcla el lujo con la comodidad, un equilibrio entre lo formal y lo casual que él mismo llama “grandeza casual”.
Desde los primeros momentos del desfile, De Sarno mostró una dirección clara, con piezas que reflejaban un estilo elevado pero accesible.
El evento comenzó de manera discreta, con un bomber jacket gris carbón, acompañado éste de pantalones a juego y zapatillas blancas. A medida que el desfile avanzaba, las referencias a la era de Tom Ford en Gucci, especialmente los años 90, se hicieron evidentes en vestidos maxi de blanco y negro, con detalles metálicos dorados, evocando el glamour de esa época.
Inspiraciones Clave: Jackie Kennedy y Tom Ford
Una parte clave de la colección fue la influencia de Jackie Kennedy Onassis, una de las figuras icónicas más asociadas con Gucci. La colección reinterpretó su estilo vacacional en Capri, con pañuelos de seda y gafas de sol sobredimensionadas, combinadas con prendas ligeras como faldas cortas y suéteres de cuello levantado.
De Sarno logró capturar el estilo relajado pero impecable de Jackie, combinándolo con el toque sensual característico de la era Ford para las noches de verano.
El ambiente del desfile fue también potenciado por la presencia de figuras como el tenista italiano Jannik Sinner y la cantante Debbie Harry, quienes acompañaron el evento desde la primera fila.
La atmósfera nostálgica fue coronada con un cierre musical emotivo: un clásico del pop italiano interpretado por Fiordaliso, que De Sarno describió como “la música con la que crecí”; un toque personal que marcó el final del desfile.
El Uso de Colores: Tradición y Modernidad
Uno de los cambios más notables, bajo la dirección de De Sarno, ha sido la re-interpretación de los colores clásicos de Gucci. El tradicional rojo amapola fue reemplazado por un profundo oxblood, que se ha convertido en la firma de De Sarno.
Esta temporada, el verde fue intercambiado por un vibrante lima neón, el cual iluminó vestidos de encaje para fiestas y un abrigo de coche adornado con ribetes de cuero oliva.
Esta paleta audaz de colores fue un testimonio del compromiso de De Sarno con la evolución de la marca. La grandeza casual, como él mismo la define, es una fusión de alta costura con la comodidad cotidiana. Esto se refleja en las prendas que equilibran detalles de alta moda, como el uso de telas refinadas, con una estética más relajada y accesible.
La Personalidad de Sabato De Sarno
De Sarno ha estado en una misión para redefinir el ADN de Gucci. Su enfoque hacia la grandeza casual se centra en combinar elementos de sastrería, lencería, cuero y siluetas de los años 60, añadiendo un toque moderno que habla a una audiencia global.
Durante una entrevista posterior al desfile, De Sarno explicó que su objetivo es crear moda “lograda y refinada”, pero que siempre mantenga una actitud irreverente.
El equipo de De Sarno también adoptó este espíritu, vistiendo camisetas con el lema: “Family, friends, teams, partners, lovers” (Familia, amigos, equipos, socios, amantes), lo que subraya el enfoque colaborativo y emocional que el diseñador ha implementado en la casa Gucci.
Un Homenaje a la Cultura Italiana
El desfile culminó con un tributo emocional a las raíces italianas de De Sarno. Su vínculo personal con la música y su familia fue evidente cuando se dirigió a abrazar a sus padres tras el desfile, marcando un final íntimo para una presentación que, aunque grandiosa en escala, mantuvo un tono profundamente personal.
El desfile de Gucci en la Semana de la Moda de Milán, bajo la dirección de Sabato De Sarno, no solo fue una muestra de alta costura, sino una declaración audaz de la dirección hacia dónde se dirige la marca.
La mezcla de influencias nostálgicas con un toque moderno y su enfoque en la grandeza casual, asegura que Gucci continúe siendo un referente en la moda global.
Con una nueva visión que reinterpreta los clásicos de la marca, De Sarno ha demostrado que Gucci sigue siendo un gigante en la industria, capaz de evolucionar y mantener su relevancia en el competitivo mundo de la moda.