5 Errores Frecuentes al Perder Peso y Cómo Solucionarlos

El 77% de los estadounidenses busca perder peso, pero solo el 20% logra mantener los resultados a largo plazo. El nutricionista Pablo Ojeda explica cuáles son los errores más comunes y cómo corregirlos para alcanzar tus objetivos de manera saludable.

Perder Peso: El Objetivo que Casi Todos Compartimos

En los Estados Unidos, perder peso es una meta frecuente debido a las crecientes tasas de obesidad y los problemas de salud que se desarrollan como resultado.

Según datos de los CDC (Centers for Disease Control and Prevention), más del 40% de los adultos en el país tienen obesidad, y la mayoría de ellos busca reducir su peso para mejorar su calidad de vida.

Sin embargo, el camino para perder peso está lleno de errores que dificultan alcanzar esta meta. Las dietas milagrosas y las restricciones extremas suelen ser las opciones más comunes, pero también las menos efectivas.

Estas dietas no solo afectan negativamente la salud, sino que suelen provocar el temido efecto rebote: recuperar rápidamente el peso perdido e incluso ganar más.

Los Datos Detrás de la Lucha por Perder Peso

Un estudio reciente del National Weight Control Registry revela que, aunque el 77% de los estadounidenses tiene como objetivo perder peso, solo el 20% logra mantener una pérdida significativa de peso durante más de un año. Además, el estudio muestra que las principales motivaciones para bajar de peso incluyen:

• Mejorar la salud (88%)
• Incrementar la confianza en sí mismos (81%)
• Verse mejor físicamente (74%)
• Incrementar la energía y el rendimiento físico (65%)

5 Errores Comunes al Perder Peso y Cómo Solucionarlos

El nutricionista Pablo Ojeda comparte los cinco errores más comunes —que las personas cometen al intentar perder peso— y ofrece soluciones prácticas para evitarlos:

1. Falta de rutina alimentaria

Un error frecuente que se comete es el de no tener una rutina establecida. Muchas personas optan por saltarse comidas o comer muy poco durante el día, lo que activa el “modo ahorro” del cuerpo, ralentizando el metabolismo.
“Es crucial comer de forma regular y en horarios establecidos,” dice Ojeda.

Esto ayuda al cuerpo a procesar los alimentos de manera eficiente y evita acumular grasa innecesaria.

2. Saltarse comidas

Saltarse el desayuno o el almuerzo es una práctica común, pero contraproducente. Según Ojeda, esto genera descontrol en los niveles de insulina y puede llevar a consumir calorías en exceso más tarde.
La clave está en mantener horarios regulares y priorizar comidas nutritivas.

Además, recomienda comer dentro de las horas de luz solar, ya que esto sincroniza el metabolismo con los ritmos circadianos.

3. Objetivos poco realistas

“La idea de perder 20 libras en un mes no es sostenible ni saludable,” advierte Ojeda. Muchas personas se frustran al no ver resultados inmediatos y abandonan sus esfuerzos.

Un objetivo realista para perder peso, según los expertos, es reducir entre el 5% y el 10% del peso corporal en un plazo de seis meses a un año. Esto asegura una pérdida gradual y saludable, evitando efectos secundarios.

4. Obsesionarse con la báscula

Pesarse todos los días puede generar frustración y aumentar los niveles de cortisol, la hormona del estrés, que dificulta la pérdida de peso.

“La pérdida de peso no es lineal,” dice Ojeda. En lugar de enfocarse únicamente en el número de la báscula, es mejor evaluar otros indicadores, como la pérdida de medidas, el aumento de energía y la mejora en la condición física.

5. Falta de ejercicio físico

Es imposible perder peso de manera saludable sin actividad física, enfatiza Ojeda. Además de ayudar a quemar calorías, el ejercicio mejora el metabolismo y fortalece los músculos.

¿Cuál es la recomendación? Incorporar al menos 150 minutos de actividad moderada a la semana, como caminar, nadar o andar en bicicleta, junto con ejercicios de fuerza dos veces por semana.

El Papel de los Hábitos en la Pérdida de Peso

Perder peso no es solo una cuestión de alimentación o ejercicio, sino de adoptar hábitos sostenibles a largo plazo. Esto incluye dormir lo suficiente, manejar el estrés y mantener una relación saludable con la comida.

Por Qué Fracasan las Dietas Extremas

Las dietas restrictivas pueden parecer efectivas al principio, pero rara vez funcionan a largo plazo. Eliminar grupos completos de alimentos o reducir drásticamente las calorías puede causar deficiencias nutricionales y pérdida de masa muscular, perjudicando la salud en general.

En su lugar, Ojeda recomienda una dieta equilibrada que incluya todos los grupos alimenticios: proteínas magras, carbohidratos integrales y grasas saludables. Esto no solo promueve una pérdida de peso sostenible, sino que también mejora el bienestar general.

El Impacto Emocional de Perder Peso

Además de los beneficios físicos, perder peso puede tener un impacto significativo en la salud mental y emocional. Sentirse más ligero, con más energía y con mayor confianza puede mejorar todos los aspectos de la vida, desde las relaciones personales hasta el rendimiento laboral.

Perder Peso con Inteligencia

Perder peso no tiene por qué ser un desafío imposible. Al evitar estos errores comunes y adoptar hábitos saludables, es posible alcanzar y mantener tus objetivos.

Recuerda, el camino hacia un peso saludable no es una carrera, sino un maratón. La paciencia y la consistencia son las claves para poder lograr el éxito.